Verano 2018



Este verano abrimos nuestros talleres a la participación de niños tanto Homeschoolers como No Homeschoolers.  

Si bien la cantidad de participantes no representa una muestra estadísticamente correcta para el grosso del mundo Homeschooler / No Homeschooler, en nuestro taller coincidió que tuvimos exactamente mitad y mitad, así que si pudimos obtener algo de información de utilidad para aquellos papás que quisieran adoptar este sistema pero se resisten debido a algunas de las dudas (y mitos) más comunes respecto al Homeschooling.

¿Y cómo van a socializar?

Empezaremos con este punto ya que suele ser lo primero que todo el mundo te pregunta cuando has decidido educar en casa. Basándome únicamente en nuestra experiencia personal puedo asegurarles que socializar no ha representado un problema en absoluto; y con base en lo observado en el taller les puedo compartir las siguientes experiencias.

¿Han escuchado la regla del 80/20 o principio de Pareto? Algo así pudimos observar aquí: 

  • Apertura: De manera general, fueron los Homeschoolers los que iniciaron una socialización sin problema: los que llegaron saludando, sin pena e inmediatamente se abrieron a hacer nuevos amigos.
Los no homeschoolers resultaron mucho más tímidos, temerosos y tardaron más en agarrar confianza.

Al final todos fueron buenos compañeros y aprendieron a trabajar juntos sin ningún problema. 

Evidentemente las razones pueden ser muchas, pero algunos de los motivos que más expresaron los chiquitos fue que "a estos compañeros no los conocen", "no es su grupo normal de amigos", "el ambiente es nuevo".

Como para los homeschoolers los amigos siempre son nuevos, no hay un grupo específico y cerrado al que pertenezcan y lo normal es conocer gente nueva todo el tiempo, abrirse a socializar fue sencillo.
  • Tolerancia: en este caso fueron los No Homeschoolers los que presentaron una actitud más tolerante en general. Los Homeschoolers fueron un poco más respetuosos con el espacio personal y las reglas de trabajo; probablemente por lo mismo les resultaba más molesto que invadieran su espacio personal. Los no homeschoolers soportan mejor las "invasiones" de espacio personal y no tuvieron inconvenientes en compartir el espacio con más personas.
  • Empatía y respeto: como era de esperarse no faltaron las situaciones tensas donde un asiento, un lápiz o un ruido en específico sirviera de detonador para comenzar un debate o discusión; sin embargo, absolutamente todos fueron capaces de hablarlo y comprender el punto de vista del otro, siempre hubo alguno dispuesto a ceder y/o a aceptar que en realidad no valía la pena generar roces por eso, aunque claro, a veces les tomó más de una plática (o muchos días) el llegar a un acuerdo.

¿Cómo van a aprender?

Nuestro curso de verano fue de Dinosaurios, el cual de por si es un tema que apasiona a casi todos los niños, así que tuvieron bastante oportunidad de compartir detalles y hechos que aprendieron de una u otra forma.

De manera general todos compartieron lo que han aprendido en libros, en revistas científicas, en películas, caricaturas, con sus papás, en museos, etc... es decir, la escuela no fue mencionada en absoluto (aunque en honor a la verdad debemos mencionar que el simple hecho de saber leer y escribir resulta básico e indispensable para todo lo demás que hayan aprendido por fuera).

Así que en base a nuestra observación les podemos decir que los niños que cuentan con padres involucrados en su educación aprenden mucho más. Esto es muy independiente al hecho de ser homeschoolers a tiempo completo, nos referimos a Involucramiento; padres que van con sus hijos a museos los fines de semana, que facilitan el aprendizaje con libros y revistas de temas apropiados e interesantes, que apoyan a la escuela reforzando lo aprendido, en fin... que están ahí con sus hijos y para ellos. 


Pero si tengo hijos de diferentes edades ¿Cómo puedo organizar las actividades?

En el curso tuvimos pequeños de 4 a 9 años. Los temas que tratamos fueron exactamente los mismos para todos, lo que variamos fueron las actividades de trabajo al final de cada taller; es decir, el tema se plantea en general, hacemos juegos y experimentos aptos para todos y a la hora de trabajar o aterrizar el tema de forma escrita, se adapta el trabajo a la capacidad de cada quien.

Algunos pueden hacer solo un dibujo, otros pueden agregar algunas oraciones, las lecturas individuales pueden tener mayor o menor cantidad de información, etc... Al final todos aprendieron lo mismo, ninguno se quedó atrás y todos los que tuvieron algo más que aportar basados en sus propios conocimientos ayudaron al resto (como los hermanos mayores en casa). 

En cuanto a tiempos, las actividades se planean con tiempo de sobra para que aquellos que requieran más tiempo puedan terminar sin presiones y de forma que aquellos que terminaron rápido puedan realizar algo más sin afectar el trabajo de los demás (dibujos, investigación, actividades complementarias, etc.)


Conclusiones y aprendizajes:

  • Niños son niños, y se van a comportar como tal sin importar que asistan o no a la escuela. 
  • La educación y crianza en valores se recibe y trabaja en casa, lo que no aprenden ahí no lo trabajan por fuera. 
  • Un niño seguro y feliz aprende fácilmente; cuando el ambiente les proporciona confianza y seguridad ellos solitos  buscan el aprendizaje (por medio de preguntas, de plática, de juegos con amigos...) 
  • Es indispensable el involucramiento de parte de los papás para el correcto desarrollo y crecimiento de los hijos.
  • Ningún tipo o sistema de educación es mejor que el otro por sí mismo. Todo depende de la armonía familiar, la organización, las necesidades comunes e individuales, la entrega, el compromiso, la seguridad y el amor dentro del hogar. 



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